lunes, 30 de junio de 2008

ANIVERSARIO: 24 años desde una detención política.

El día 2-3 de Julio de 2008 se cumplen 24 años de la detención que culminó con 6 años de prisión política y posterior liberación al llegar la democracia a Chile. Me permito transcribir el Título XVIII. 18. Razones humanitarias, como recordatorio de dicha fecha.

"TITULO XVIII.

18. RAZONES HUMANITARIAS.

El día 2 de Julio de 1984 fui detenida cuando por razones humanitarias acompañaba a un enfermo de apellido Belmar. También detuvieron a los dueños de casa y, al parecer, a unos niños a los cuales nunca vi. También detuvieron al enfermo. Ese día yo había sido contactada en la plaza Italia, y en un pequeño auto hicimos un trasbordo en un lugar de Santiago que yo no conocía para llegar después a una casa ubicada en una calle sin salida. La casa estaba a oscuras y tenía 3 dormitorios, baño y cocina. Allí vivía al parecer un matrimonio con unos niños. Ese día hacía frío y estaban húmedas las calles. La mujer me ofreció un café que yo acepté mientras permanecía en el living. Al fondo de un pasillo había muchos hombres que entraban y salían de una habitación con luz y donde estaba la persona enferma que en realidad había sido herida a bala en un enfrentamiento con el ejército, dijeron después. Uno de esos hombres se acercó a mi cuando se iban a retirar de la casa después de las diez de la noche y me pasó un dinero porque quería que yo acompañara al herido a una clínica a la mañana siguiente. (El dinero se lo entregué al dueño de casa para que lo guardara hasta el día siguiente). Ellos se retiraron, y la dueña de casa me facilitó una camisa de dormir para que me acostara en la misma pieza del herido. El era un hombre joven que dijo venía del sur y que tenía muy mala suerte al haber caído. Permanecí allí, y cerca de la medianoche, creo, se escucharon disparos a lo lejos, como de ametralladora y al rato sentí que alguien golpeaba la ventana de la pieza que daba a la calle donde dormía el matrimonio. Al parecer, la mujer se levantó y habló con alguien y, al rato allanaron la casa. Entraron muchas personas vestidas con parcas azules, y también carabineros de uniforme, una persona que tomó fotografías y otra que tomó mis huellas en una tarjeta. Ellos dijeron que allí funcionaba una clínica clandestina.

Me vendaron la vista con una venda roja de género y me subieron a un vehículo, un furgón de puertas corredizas, y un hombre hizo que apoyara mi cabeza en sus rodillas y me cubrió la cabeza con una chaqueta. Después de un largo trayecto llegamos a un lugar donde se escuchaba el ruido del agua. Bajamos unas escalas. Era un lugar desconocido para mí de detención. (Cuando llegué a ese lugar me revisaron, tuve que entregar todas mis cosas y firmar un papel; y tuve que ponerme una especie de overol o mameluco, sin que yo llevara nada debajo).

Estaba absolutamente desconcertada y no podía razonar bien. Me encerraron e incomunicaron. Creo que durante cinco días perdí noción del tiempo y el espacio. El lugar al parecer era un subterráneo. Me daban desayuno, almuerzo y onces, por lo cual podía calcular más o menos las horas del día. Te puro y pan. Comidas diferentes, pollo con arroz y fréjoles. El baño era de azulejos blancos y me llevaban con la vista vendada allí, alguien que parecía un soldado. Me tomaba del brazo pues yo no podía ver y esperaba fuera que yo me bañara e hiciera mi aseo personal. Los primeros dos o tres días nadie me preguntó nada. Después entraron a la celda personas diferentes para preguntarme como había llegado al lugar donde estaba el herido. Yo les decía que no conocía a nadie, y que me habían pedido, tan sólo, acompañar a una persona muy enferma a quien tampoco conocía, y al cual querían trasladar a una clínica. Me costaba defenderme en esa situación, pues yo pensaba que no había hecho absolutamente nada para estar detenida en esas condiciones. Tengo la impresión, en algún momento, de estar en una habitación a oscuras donde había hombres y una persona que me pedía que hiciera un relato, y que lo que yo hablaba aparecía en una pantalla iluminada, como en una película. Yo no podía hacer un relato, hubiera preferido que me hicieran preguntas. En algún momento perdí el autodominio de mi conciencia, no se si me dieron algún medicamento o droga, y si fue con autorización de algún médico. Me parecía estar en una habitación oscura con caras blancas y azules como pintadas con óleo, que aparecían y desaparecían como si se deshicieran en la oscuridad. Parecían máscaras flotantes. En esa oscuridad yo buscaba un ángel, pues alguien me había dicho que se llamaba así. Me daba la impresión que había mucha gente allí y pensé que algunas de esas personas eran médicos. En otro momento me pareció escuchar el choque de las armas. Yo hablaba con alguien que permanecía en la oscuridad, y le decía: “Es curioso, usted me agrada y no debería agradarme, pero me agrada porque es gentil”, y me daba mucha risa. Parecía ebria, me parecía flotar en un mar de oscuridad. Después desperté en una habitación en penumbras donde había un hombre a mi lado mirándome. La habitación estaba a oscuras pero penetraba la claridad de un pasillo. Parecía enojado y me preguntó que me pasaba, si estaba borracha. No le respondí nada, y no se cuando salió de allí. Me dejó encerrada en una habitación con luz. Sentía que todo giraba pero pensé que no podía estar allí eternamente, y pensé además, que allí había grabaciones. Se escuchaba como si hubiera una radio encendida en otro lugar. Tocaban música clásica pero en algún momento se escucharon groserías, las cuales fueron interrumpidas, y no escuché nada más. Nadie me golpeó. Tal vez fui drogada pues en algún momento perdí completamente el sentido. Me sacaron de allí y me llevaron a una fiscalía militar. Estuve dos veces, al parecer, en una fiscalía militar En una de esas dos veces creo que vi a mi hijo mayor, no estaba segura si era él. Me incomunicaron otros cinco días en la cárcel de San Miguel, con orden de un fiscal militar. Allí me recibió un funcionario de gendarmería, el cual se comportó profesionalmente; junto a él había una funcionaria. Allí me dejaron encerrada e incomunicada en una enfermería. Los dos últimos días me encerraron en un calabozo antes de trasladarme al recinto donde estaban otras compañeras de detención, presas políticas, a las cuales no conocía. Pero eso es ya otra historia".

domingo, 29 de junio de 2008

NOMI EVE SUYAI

El día 27 de Junio de 2008 ha nacido a las 19:15 hrs de Alemania y 13:15 hrs de Chile NOMI EVE SUYAI. Pesó 3.700 kgs. y midió 50 cms. Sus padres son Amelia y Sasha. Su pequeña hermana es Zoe Ayalén. Y todos estamos muy contentos con su llegada.

viernes, 27 de junio de 2008

Un sueño singular.

Soñaba que estaba en una parte muy alta, en Cartagena, desde donde podía ver el mar. El mar estaba un poco agitado, era un gran movimiento de una masa de agua que se balanceaba de un lado a otro, y su color era un hermoso azul de Prusia. Desde donde yo estaba mirando veía como el mar subía lentamente de nivel e iba cubriendo las partes más bajas. Sentía bastante temor. Podía ver como mucha gente empezaba a subir hacia las partes altas; familias y personas que se subían en sus vehículos para alejarse del mar, hacia otros pueblos o ciudades, o hacia las partes más altas de los cerros. De pronto me veía dentro de un edificio de departamentos donde habían niños pequeños y donde estabámos preparando todo para emigrar. Parecíamos estar en una situación extrema, y yo pensaba de pronto que necesitábamos llevar algo muy importante en nuestro viaje, una olla a presión. Tenía la idea que una olla a presión sería muy útil, porque los alimentos se cocían rapidamente y en cinco minutos herviría el agua. Todo se concentraba en la olla a presión... y desperté.

miércoles, 25 de junio de 2008

Una mariposa blanca.

El día era cálido, de primavera, un cielo límpido y azul. Los árboles floridos pintaban de rosa y blanco la avenida del parque. Las personas caminaban tranquilamente por las avenidas y senderos. El césped me invitaba y decidí descansar allí un rato. Me senté en la mullida hierba de trébol y me saqué los zapatos, mejor dicho las botas de piel de antílope que llevaba puestas y las dejé a mis pies. Y de pronto vi volar hacia mí, una mariposa blanca, absolutamente blanca, tenía tan solo unas pintas negras en el borde de las alas; y de pronto se posó delicadamente en el taco de una de mis botas. Sorprendente, siempre pensé que las mariposas solo se posaban en las flores de los jardines para libar su néctar o contribuir a la polinización de las plantas. Nunca pensé que una mariposa blanca se posaría en el taco de una de mis botas.

miércoles, 18 de junio de 2008

YO NUNCA HABIA VIAJADO EN AVION.

"Nunca había viajado en avión. Mi familia me despidió en el aeropuerto. Me sentía muy emocionada por partir. Crucé la puerta de control y llegué al sitio donde esperaban los compañeros de viaje. Un hombre alto y delgado nos entregó unos documentos de viaje. Ibamos en dirección a Suecia: una pareja y una muchacha que viajaba a reunirse con su esposo, y yo.
De pronto ví que la muchacha estaba llorando y me acerqué para preguntarle que le pasaba. Me dijo que echaba de menos a sus padres. Le dije que no se preocupara y que disfrutáramos el viaje, porque yo nunca había viajado en avión. Ella se tranquilizó y me dijo que ella tampoco había viajado nunca en avión. Subimos al avión y nos sentamos juntas y la pareja en otro asiento. El viaje fué muy emocionante. Pasamos sobre la cordillera de los Andes y rápidamente pasamos por el aeropuerto argentino, y luego el avión se detuvo en Brasil a completar su pasaje y prepararse para cruzar el Atlántico. La cena fue exquisita, comida caliente y a la carta. Nos entregaron unas mantas y zapatillas para los pies. Air France tiene una excelente atención personalizada. Mi compañera de viaje consiguió unos audífonos para escuchar música y yo dormité. Toda la noche el avión cruzó el Atlántico, amanecimos en pleno continente africano bajo un cielo rojizo y un clima pegajoso y húmedo, cálido. El avión descendió en Dakar y allí nos bajamos y conocimos el pequeño aeropuerto, aunque cada cual andaba por su cuenta para ver lo que le interesaba más. Me habría gustado comprar esas túnicas coloridas y objetos de Africa, pero yo no llevaba dinero como para eso. Aproveché de enviar unas tarjetas de Africa a Chile a través del correo. Después de tres horas más o menos regresamos al avión para proseguir viaje hasta París, donde el avión haría escala.
Llegamos a París al atardecer y hacía frío parecía que iba a llover. Nos cambiamos ropa en el avión y bajamos solo con un bolso de mano porque el resto del equipaje seguía viaje por su cuenta hasta Suecia. El aeropuerto de Orly era inmenso, lleno de escaleras mecánicas y cintas de transporte que nos llevaban a través del aeropuerto hasta la salida. Allí tomamos un bus que nos llevaría al centro de Paris, al hotel Méridièn. Era un hotel de muchos pisos. Cenamos en el restaurant del hotel y luego salimos a tomar café en un café que había al lado del hotel. Allí unos taxistas nos invitaron a conocer París de noche, pero les dijimos que no porque teníamos que acostarnos temprano para proseguir viaje al día siguiente. Nos volvimos al hotel y bebimos un último coctel y nos fuimos a dormir para proseguir viaje al otro día. Despertamos tarde y tuvimos que volar al aeropuerto. Proseguimos viaje hasta Dinamarca, allí tuvimos que esperar otras horas en el aeropuerto para hacer un trasbordo a las líneas aéreas escandinavas. Finalmente proseguimos viaje y llegamos al sur de Suecia, donde nos esperaban a cada uno nuestros amigos".

martes, 17 de junio de 2008

UN GRAN ESPEJO

"Era el centro de Santiago al mediodía lo que me impedía caminar con tranquilidad. Cientos de personas iban y venían por la vereda. Huérfanos, Estado, Alameda, San Antonio. Mujeres cargadas de paquetes, y algunas con niños de la mano. Hombres y mujeres que trabajaban en las oficinas del centro y que seguramente aprovecharían la hora de almuerzo para tomar una colación en cualquier restaurante o fuente de soda. Vendedores callejeros y sus ofertas a viva voz. Yo buscaba una tienda porque quería comprarme un vestido. Había recorrido toda la calle Ahumada y no había encontrado nada. Llegué cerca de la Casa Central de la Universidad de Chile y miré un poco en la Librería universitaria los últimos títulos de libros que estaban allí en exhibición. Crucé la calle y entré en un pasaje; siguiendo letreros llegué a una tienda en un segundo o tercer piso. ¡Por fin! Después de probarme varios trajes encontré un vestido de una tela parecida a la seda y al algodón al mismo tiempo, gruesa y suave al tacto. Era un vestido camisero, manga larga, cuello y escote en V y un pabilo en la cintura. Abotonado en la parte de adelante sólo hasta la cintura. Los botones estaban forrados en la misma tela del vestido. Era de un color rojo oscuro con dibujos en azul marino y gris. Me gustó apenas lo ví y entré al probador para ver como me quedaba. Me gustó enseguida. El largo era perfecto, hasta la rodilla en época que muchas personas usaban minifaldas, o midi o maxi faldas. La moda era muy heterogénea en ese tiempo. Decidí que ese vestido lo llevaba puesto. Salí del vestidor pero no encontré a la vendedora que me había atendido, y me paré cerca de una puerta a esperar que apareciera. De pronto giré ligeramente mi cabeza y vi un poco más allá a una muchacha que llamó mi atención. Era joven, de largos cabellos castaños, delgada. Una ligera mirada de ensueño en sus ojos y me miraba con cierta atención. También me puse a observarla y vi que ella no me quitaba los ojos de encima. Qué curioso. Caminé disimuladamente para verla más de cerca. Me estaba mirando a mí misma en un gran espejo que ocupaba toda una pared. Me dió tanta risa. Y la muchacha reía al mismo tiempo que yo, pues era yo misma".

lunes, 16 de junio de 2008

EL HOMBRE QUE PARECIA NO ESTAR PIDIENDO NADA.

"Hace muchos años, caminábamos con mi esposo, de noche, por unas calles muy oscuras del centro de Santiago, caminábamos de regreso a nuestra casa. Hacía bastante frío. De pronto vi a un hombre sentado en el suelo acurrucado contra la pared, no parecía estar pidiendo nada. Algo me impresionó y me hizo decir a mi esposo que por qué no le dábamos algo de dinero para que pudiera alojarse tal vez en una hospedería. Mi esposo dijo que sí , y yo me devolví unos pasos con el dinero, inclinándome para dejarlo en sus manos. Cuando puse el dinero en sus manos el hombre rompió en llanto. Yo le dije que tal vez eso podría servirle para algo, y me alejé hacia donde estaba mi esposo. Me sentí muy impresionada por el llanto de ese hombre que parecía un mendigo pero que no estaba pidiendo nada. Nunca olvidé esa oscura calle con ese hombre sentado en el suelo, con el dinero en las manos y llorando, no me atreví a tocarlo".

domingo, 15 de junio de 2008

LA ABEJA.

"Era un día muy frío y oscuro de invierno, estaba sola en mi casa y me puse a mirar por la ventana que da al patio. Miré un macetero que tenía allí con un pequeño cactus, de esos que no tienen espinas, y ví que cerca de las raíces había un insecto que parecía muerto. Me acerqué bien a verlo y ví que era una abeja. Parecía absolutamente congelada o muerta. Fuí a buscar un palo de fósforo para tocarla y ver si aun estaba viva. El cielo estaba absolutamente oscuro casi negro y pensé que esa noche llovería. Tomé entonces el macetero y lo entré a la casa. Y ahí estaba la abeja, al tocarla suavemente había movido una de sus patas, pero nada más. Pensé que estaba casi muerta y la dejé ahí en esa habitación. Al menos dentro de la casa estaba abrigada. Me fui a dormir a mi habitación y me encerré con llave. Al día siguiente temprano fui a ver si estaba la abeja, todavía estaba allí, y se movía un poco más. Había llovido bastante en la noche y la dejé un día más dentro de la casa. Al segundo día hubo un hermoso día de sol, y saqué el macetero de la pieza para ponerlo afuera en el borde de la ventana al sol. Ahí ya revivió la abeja. Y salió volando hacia el jardín. Pensé que era curioso que la abeja estuviera en mi jardín en esa época del año, pero pensé también que habían plantas para que se protegiera. ¿Sobrevivió la abeja? No lo se. Pero después de esa experiencia, he visto volar cerca de mi ventana distintas abejas, siempre cerca del lugar donde estuvo esa abeja que cuidé en mi casa".

sábado, 14 de junio de 2008

¿UNA EXPERIENCIA EXTRASENSORIAL?

¿UNA EXPERIENCIA EXTRASENSORIAL?

"Ese día domingo había estado casi todo el día tratando de encontrar a alguno de mis amigos en su casa. Pero nadie estaba en ella. Me senté un rato en una iglesia y descansé allí pensando en la vida y los problemas de la vida. Finalmente casi al anochecer encontré a una de mis amigas en casa. Y me recibió con mucha generosidad invitándome a dormir esa noche en su casa. Ella vivía sola en un pequeño departamento, y arregló para mí una cama en un sillón cama en el living. Estaba yo tan cansada y de alguna forma agobiada por problemas que no tenían solución, que inmediatamente después de una ligera cena, le dije que deseaba acostarme a dormir, lo cual ella accedió. Eran pasadas las doce de la noche y creo que me dormí enseguida.
Desperté de pronto en medio de la oscuridad, y sentí que salía de mi propio cuerpo como si fuera una gasa o espíritu, o ánima, y flotaba sobre el piso. La sensación era de ser no corporal y de estar en un plano donde no podía sentir nada físico, podía ver a mi alrededor y miré hacia la habitación de mi amiga donde la puerta estaba abierta y aparecía como si estuviera iluminada, con la luz encendida. Flotando me dirigí a ella, crucé la puerta abierta y llegué hasta el borde de su cama donde ella dormía y traté de hablarle, pero no me salían las palabras; trataba de pedirle ayuda. ¡Ayúdame! pero ella no me escuchó y no despertó. Desesperanzada regresé hasta mi cama y allí estaba mi cuerpo inerte, sentí que entraba en él y desperté con una profunda sensación de pánico, porque no podía moverme. Estaba absolutamente inmóvil, paralizada. Traté de mover primero una mano, la punta de los dedos, luego la pierna derecha desde la punta de los dedos del pie. Finalmente sentí que recuperaba mi movilidad y que el corazón me latía con fuerza. No pude volver a dormir esa noche".
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Otro sueño extraño.

"Soñaba que estaba en la antigua casa de mi abuela, una casa antigua que tenía una galería con vidrios, y un patio donde había un parrón y una pérgola, además de un gran olivo. El patio estaba rodeado de habitaciones como las casas chilenas del campo. De pronto me encontraba bajo el parrón y sentía que me hacía pequeña, miraba hacia arriba y veía la imagen de Cristo entre las nubes fumando un cigarrillo., ¡Qué sorprendente! De pronto se le caía el cigarrillo al suelo, y yo me agachaba a recogerlo, pero para devolvérselo tenía que levantar el brazo y de pronto sentía que empezaba a crecer para alcanzarlo. Era tan curioso, crecer pasando a través de la trama del parrón como si yo fuese un espíritú. El volvía a dejar caer el cigarrillo, y yo volvia a pasárselo. Y descubrí que podía achicarme y alargarme a voluntad. Desperté de pronto pensando que sueño tan extraño había tenido".

viernes, 13 de junio de 2008

SUEÑO SURREALISTA

SUEÑO SURREALISTA.
"Estaba parada en medio de una calle vacía, miré hacia la derecha y ví el nuevo y gran edificio del BancoEstado, pintado de blanco. Estaba ubicado justo en la esquina donde empieza la calle 21 de Mayo. La calle donde estaba parada se perdía en el horizonte y destacaba el pavimento gris. Hacia la izquierda había una plaza y más allá el edificio de la Cruz Roja, y una calle angosta que subía hacia el cerro, cerro repleto de casas multicolores de madera, donde vivían los trabajadores del puerto, pero todo estaba vacío. No habían personas. De pronto me miré los pies y vi que estaba sin zapatos, sólo tenía puestos unos calcetines de listas rojas y grises. Lo encontré tan extraño. ¿Qué hacía yo en medio de la calle, sin zapatos, sólo con calcetines con listas rojas y grises? me invadió una ligera molestia y me incliné para sacarme los calcetines, pero después de sacarlos me di cuenta que en mis pies seguían puestos los calcetines. Volví a sacarlos y volvieron a aparecer en mis pies, muchas veces. Y cuando miré hacia atrás ví un reguero de calcetines con listas rojas y grises en el suelo de la calle". (Sueño surrealista que tuve hace mucho tiempo).

miércoles, 11 de junio de 2008

Y LA HABITACION SE LLENO DE PRIMAVERA...

"Mi habitación estaba en el último piso de un edificio en altura, tenía una pequeña entrada donde había un gran closet donde guardaba mi ropa y bolsos de viaje;al frente, estaba la puerta del baño, baño de azulejos blancos, suelo, paredes y techo. Era una sensación especial entrar a ese baño. Inodoro blanco y lavamanos blanco y sólo una ducha cromada en la pared con dos llaves empotradas. El agua salía tan caliente que había que mezclar el agua caliente con el agua fría. Entre la puerta de entrada y la entrada a la habitación había una puerta de vidrio enmarcada en madera oscura. La habitación era cuadrada y tenía una gran ventana y bajo ella un calefactor. Las paredes de la habitación tenían papel mural, bellas flores de color palo de rosa. Un sillón cama pegado a la pared y un escritorio cerca de la ventana. Más allá un estante repleto de libros y encima una planta verde, un fino helecho que llegaba casi hasta el suelo. El suelo de la habitación tenía una alfombra o cubre piso muro a muro de color gris. Un sillón delante del escritorio y dos pisos altos de madera clara. La luz estaba en el escritorio y era una lámpara con mango flexible que daba luz indirecta a la habitación cuando la volvía hacia el techo, de lo contrario iluminaba directamente los libros que estaba leyendo o el cuaderno donde escribía. Sobre el sillón cama había un gran plumón en todos cafés y rojos y cojines de colores. Una pequeña mesa junto al sillón cama donde me servía a veces café o servía te a mis amigos. O donde podíamos jugar ajedrez. Me gustaba mirar por la ventana y podía ver desde allí, los otros edificios, mucho más lejos. Los jardines y las canchas para jugar tenis o voléibol. Podía ver desde allí a los estudiantes cuando salían a sus clases. Podía verte cuando aparecías a lo lejos con tu abrigo azul oscuro y tu gorro de lana metido hasta las orejas y tu bufanda azul. Hacía mucho frío y la nieve cubría el campo. Seguía tus pasos hasta que doblabas la esquina y dejaba de verte, pero sabía que estabas entrando al edificio, luego estabas en el ascensor subiendo los doce pisos. Un rato más y sentía como golpeabas la puerta de mi habitación. El corazón me latía fuerte en el pecho. Sentía una gran alegría al abrirte la puerta, y cuando tú entrabas, la habitación se llenaba de primavera, mientras hervía el agua para el te en una jarra, la nieve caía afuera y nos esperaba un juego de ajedrez"

martes, 10 de junio de 2008

PETIT FLEUR

"Conocí al que iba a ser mi esposo en el Instituto Chileno Francés de Cultura en el mes de Abril. La segunda oportunidad en que lo ví fue en el mes de Mayo en la "Fiesta de Mechones" o bienvenida a los primeros años del Instituto Pedagógico.

Todos los estudiantes estaban allí ese día y todas las muchachas usaban trajes de fiesta. El mío era de un género brillante de color dorado, sin hombros, con finísimos tirantes también dorados. Muchachos y muchachas bailábamos, la música era alegre y bebíamos Coca-cola.

Mi primera experiencia de una relación formal empezó ese día. la relación con el que iba a ser mi esposo duró algunos meses y luego nos separamos. El partió de vacaciones a su casa y yo le recordé algunas veces, aunque estaba preocupada por mis estudios.

De esa época recuerdo mi primera canción romántica: "Petit fleur".

lunes, 9 de junio de 2008

LISTA DE OBJETOS SIN ORDEN CRONOLOGICO.

Lunes 090608 - 22:21hrs.

LISTA DE OBJETOS sin orden cronológico.

1. ICE BLUE, loción para varón.
2. Una guitarra.
3. Un gran espejo.
4. Un departamento de un ambiente.
5. Una poesía.
6. Una habitación desordenada.
7. Una botella de vino tinto iluminada por la luz de una lámpara.
8. Una docena de rosas rojas y una amarilla.
9. Una escala de caracol.
10. Ojos azules.
11. Una fiesta.
12. Taurus.
13. La palomera
14. Una cena.
15. Un pequeño libro miniatura con los "20 poemas de amor y una canción desesperada de Neruda".
16. Un terrón de azúcar.
17. Un ajedrez tallado en madera.
18. Un prisionero.
19. Un libro de poemas de Rubén Darío.
20. Un guerrillero.
21. Un beso.
22. Hombre de fuego y agua.
23. Los versos del capitán.
24. Un taxi.
25. Una pulsera de cobre.
26. Mi retrato.
27. Un bote meciéndose bajo la luz de la luna.
28. Géminis
29. Un cangrejo.
30. Un hombre de Aries.
31. Una estufa encendida en la noche.
32. Un argentino.
33. Otro cangrejo.
34. Un cajón con manzanas.
35. Un pequeño objeto de oro.
36. El teatro Municipal.
37. Leo.
38. Tercer cangrejo.
39. Escorpión.
40. Un español.
41. Un abogado.
42. Una chomba de color rojo.
43. Sagitario.
44. Una bandera azul y roja.
45. Una ampolleta luz de día.
46. Un candelabro de fierro.
47. Un automóvil.
48. Un hombre griego
49. NN
50. NN

domingo, 8 de junio de 2008

INICIACION SEXUAL

"El cielo estaba azul y unas nubes blancas flotaban en esa inmensidad que parecía alejarse hacia el infinito. El rumor de la ciudad subía como una marejada tibia. Los árboles quietos levantaban su follaje y nos daban generosa sombra mientras las hojas temblaban ligeramente empujadas por el viento. Contemplé una de mis manos que reposaba sobre la hierba blanda y mullida. Mis manos son blancas y pequeñas, de uñas cortas. Sentía que la vida entera estaba allí. De pronto apareció un mendigo que se quedó quieto mirando. Vete, vete... y el hombre desapareció.

Una cierta tristeza llenó mi corazón, sentía como si una mano oprimiese mi alma.
Y de pronto la vida penetró mi cuerpo.
La vida como un remolino llena de fuerza.... mientras yo pensaba que la vida seguía su curso inexorable.

La niña pequeña que era yo, se había alejado para siempre... una pequeña mancha de sangre quedó en mi vestido de organza verde agua.
¿Eso significada ser una mujer?".

sábado, 7 de junio de 2008

SEXUALIDAD

Sábado 070608 - 18:16hrs.

"La sexualidad es el conjunto de fenómenos emocionales y de conducta relacionados con el sexo, que marcan de forma decisiva al ser humano en todas las fases de su desarrollo.

El concepto de sexualidad comprende tanto el impulso sexual, dirigido al goce inmediato y a la reproducción, como los diferentes aspectos de la relación psicológica con el propio cuerpo (sentirse hombre, mujer o ambos a la vez) y de las expectativas de rol social. En la vida cotidiana, la sexualidad cumple un papel muy destacado ya que, desde el punto de vista emotivo y de la relación entre las personas, va mucho más allá de la finalidad reproductiva y de las normas o sanciones que estipula la sociedad.

Además de la unión sexual y emocional entre personas de diferente sexo (véase Heterosexualidad), existen relaciones entre personas del mismo sexo (véase Homosexualidad) que, aunque tengan una larga tradición (ya existían en la antigua Grecia y en muchas otras culturas), han sido hasta ahora condenadas y discriminadas socialmente por influencias morales o religiosas.

Durante siglos se consideró que la sexualidad en los animales y en los hombres era básicamente de tipo instintivo (véase Instinto). En esta creencia se basaron las teorías para fijar las formas no naturales de la sexualidad, entre las que se incluían todas aquellas prácticas no dirigidas a la procreación. Hoy, sin embargo, sabemos que también algunos mamíferos muy desarrollados presentan un comportamiento sexual diferenciado, que incluye, además de formas de aparente homosexualidad, variantes de la masturbación y de la violación.

La psicología moderna deduce, por tanto, que la sexualidad puede o debe ser aprendida. Los tabúes sociales o religiosos —aunque a veces han tenido su razón de ser en algunas culturas o periodos históricos, como en el caso del incesto— pueden condicionar considerablemente el desarrollo de una sexualidad sana desde el punto de vista psicológico.

A partir de la década de 1930, comenzó a realizarse la investigación sistemática de los fenómenos sexuales. Posteriormente, la sexología, rama interdisciplinar de la psicología, relacionada con la biología y la sociología, tuvo un gran auge al obtener, en algunos casos, el respaldo de la propia sociedad, principalmente durante los movimientos de liberación sexual de finales de la década de 1960 y principios de la de 1970.

Los primeros estudios científicos sobre el comportamiento sexual se deben a Alfred Charles Kinsey y a sus colaboradores. En ellos pudo observarse que existen grandes diferencias entre el comportamiento deseable exigido socialmente y el comportamiento real. Asimismo, se observó que no existe una clara separación entre el comportamiento heterosexual y el homosexual ya que, según encuestas de esa época, el 10% de las mujeres y el 28% de los hombres admitían tener comportamientos homosexuales y un 37% de los hombres estar interesados en la homosexualidad.

En la década de 1960, William H. Masters y Virginia E. Johnson investigaron por primera vez en un laboratorio los procesos biológicos de la sexualidad, elaborando el famoso "Informe de Masters y Johnson”.

Actualmente, en el límite de las formas ampliamente aceptadas de comportamiento sexual se encuentran las llamadas perversiones. La evolución en los usos y costumbres y el ensanchamiento del margen de tolerancia ha hecho que conductas consideradas tradicionalmente perversas se admitan como válidas en el marco de los derechos a una sexualidad libre. Sólo en los casos de malestar o de conflicto del propio individuo con sus tendencias, o en aquellos en los que se pone en riesgo la integridad física y moral de terceros, se impone la necesidad de tratamiento psicoterapéutico.

La sexualidad, en definitiva, no debe apartarse de dos principios fundamentales: el mutuo consentimiento y la superación de la autocensura, para que cada individuo se acepte a sí mismo, aunque ello exija a veces lograr el difícil equilibrio entre las inclinaciones individuales y ciertos prejuicios y atavismos sociales.".
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viernes, 6 de junio de 2008

AVENTURA, SEXO Y PROFUNDOS VALORES HUMANOS.

Viernes 060608 - 17:14hrs

AVENTURA, SEXO Y PROFUNDOS VALORES HUMANOS.

"Iniciación sexual.
Yo era virgen a los dieciocho años.
Creo que hombres y mujeres somos distintos.
Mi madre me enseñó que a los once años yo era una mujer porque podía tener un hijo.
Me casé un día de verano. No me casé por la iglesia sólo por el registro civil. Me casé con un hermoso vestido de calle de seda de color café y hojitas verdes. El primer hombre con quien tuve relaciones sexuales fue mi esposo. No tuvimos luna de miel. La fiesta de matrimonio fue sencilla, un almuerzo en casa de mis padres y después nos fuimos a nuestra casa, un departamento pequeño que habíamos arrendado en una calle llamada Antílope.
Era un bello y pequeño departamento de un ambiente gris perla y rosa. Al principio no teníamos muebles sólo nuestra cama. Un amigo nos regaló una hermosa mesa de madera de pino estilo frailero con dos bancas, pero llegaría algunos días más tarde. Yo había comprado como parte de mi ajuar, un juego de te de loza checoslovaca, toallas de colores y muchas otras cosas para la casa. Y me regalaron, además, una batería completa de cocina. Tenía una alfombra araucana de colores que colocaba en el suelo, y allí colocaba todas las cosas para comer y un jarro con flores. Cuando en la noche miraba por la ventana que era muy grande y veía el cielo directamente porque no tenía persianas ni cortinas, pensaba que nadie había más feliz que yo.
Amé mucho a mi esposo y tuve con él hijos, y amo mucho a mis hijos.

"Planificación y control de natalidad. Decidimos con mi esposo no tener más hijos.
Dejé de amar a mi esposo después que nacieron mis hijos.
Vivimos juntos y nos separamos de hecho en 19... Mis hijos quedaron con su padre.
La vida nos llevó por caminos distintos y a veces lejanos. Salí al extranjero. Tuve otras relaciones y parejas sentimentales.


"Cuando regresé a Chile me separé legalmente de mi esposo. Anulé mi matrimonio en la Corte de Apelaciones de Santiago. Después de anular mi matrimonio no volví a tener una relación sexual con ninguna otra persona. Mi esposo se casó de nuevo y tiene otros hijos. Es feliz y yo también a mi manera. Yo ya no amo a mi esposo y pienso que nunca he amado a otra persona.

"Creo que se puede tener sexo sin estar enamorada.
Es necesario si, atracción sexual. Y también respeto mutuo pienso yo.
De la ingenuidasd no soy, pero tampoco de la impudicia
.


"Pienso que es posible que las virtudes y las emociones, sentimientos y pasiones se ejerciten al mismo tiempo.
Busco virtudes: la prudencia, la fortaleza y la templanza. La fe, la esperanza y la caridad.
Y al mismo tiempo experimentar sentimientos y emociones intensas.